Joaquín Leguía, director ejecutivo de Ania, transmite una energía positiva e ilusión por lo que hace que no se encuentra fácilmente. La semana pasada, la noche del partido entre Argentina y Polonia, miles de hombres, mujeres y niños, algunos con la cara pintada con los colores celeste y blanco de Argentina colmaron un estadio al aire libre en un pueblo llamado Feroke, donde un legislador había organizado una proyección. Eso sirvió años más tarde para luchar por algo que bullía en su interior, la necesidad de educar en la protección del medioambiente y cuidar el único hogar que tenemos.